Adoro la distancia que hay entre el hombre que escandaliza servicios y el que se sonroja si le digo que es más bonito que los sueños. Él no sabe que brilla más que cualquier estrella de neón, que por verle feliz me marcharía y por hacerle feliz siempre me quedo. Que celebro su existencia como un RIP a la tristeza. Él es libre, utópico y un poco mío. Solo debería tenerle miedo al miedo, y hasta el miedo lo amaría. Suele volar sin alas y te arrastra tan alto que ni te acuerdas de que una vez sentiste miedo a caerte.
No hace falta que me digais eso de que perdeis la cabeza por eso de que su espalda. Ya sé de sobra que tiene esa sonrisa y esas maneras. Pero además le he visto serio, ser él mismo, y en serio que eso no se puede describir con palabras. Por eso me sé de memoria eso de que míralo como bebe la cerveza, y eso de que él puede llegar a ser tu mejor motivo para seguir viva y a la mierda con la autodestrucción.
Pero no sabeis lo que es caer desde un precipicio y que él aparezca de golpe y de frente y te diga: Venga, hazte un porro y me lo cuentas. Que las suspicacias, los disimulos cuando su culo pasa, las incomodidades de orgullo que pueda provocaros son algo con lo que ya cuento. Quiero decir que yo también lo veo, que cuando él cruza por debajo del cielo solo el tonto mira el cielo. Que sé como agacha la cabeza, levanta la mirada y pone cara de ternura infinita. Que conozco su voz en formato susurro, y en formato eufórico y en formato secreto. Que me se sus cicatrices, y el sitio que le tienes que tocar la oreja para hacer que se ría. Que no solo conozco su última pesadilla, tambien las 1000 anteriores. Y yo si que no tengo cojones de decirle que no a nada porque tengo mas deudas con sus brazos de las que nadie tendrá jamas con la luna. Y mira que hay tontos enamorados en este mundo. Que se la cara que pone cuando se deja ser completamente él, rendido a ese puto milagro que supone que exista. Que os entiendo, que yo escribo sobre lo mismo, sobre el mismo, QUE RAZONES TENEMOS TODOS, PERO YO MUCHAS MAS QUE VOSOTROS. Conocerle fue mi golpe de suerte, y cuando pensé que no podía ser más alucinante, de repente, le da un ataque de cariño y se vuelve el koala más sexy de esta selva. Y te mira como él te mira, te ve guapa y se te borran de la cara todas las derrotas reales o imaginarias. Porque si la magia existe, seguro que él es el truco. Me gusta cuando se agarra a mi cuando siente que ya no puede más, y en realidad salvándole me salvo. Está hecho de un material tan especial que te cambia la vida cuando te toca. A veces me da risa verle perdido entre una infancia mal curada y un montón de sueños rotos, ojalá pudiese verse desde mis ojos.
Una vez olvidé nuestro lazo de sangre y pude ver que abrazarle desnudo es romper la gravitación universal. Abrazarle desnudo es remar contra el tiempo y ganar la batalla.
Pero quererle... Quererle es otra historia. Es como estrellarte constantemente contra una pared y saber que los golpes valen la pena. Porque los amigos terminan siendo la familia que escoges, y yo no pude haber hecho mejor elección. Así le quiero. Así te quiero.
Te quiero.
Así de simple.
Ni siquiera me siento original por eso.
Tan solo capaz de derribar medio millón de imperios.
Perdóname.
Él solo tiene un defecto: Yo
Y hasta eso le queda bien.
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