martes, 1 de noviembre de 2011

Diario de una chica invierno:

Que vivía en continuo verano.
Me gustan las bufandas eternas, el café caliente con trocitos de chocolate y las estufas humanas. Me gustas casi todo y me gustas casi nada. ¿Qué se escribe en una carta de amor cuando ya no hay amor? Aún recuerdo cuando éramos tan eléctricos que no hacían falta más que una sábana y el olor a mandarinas para ser completamente felices. ¿Te acuerdas? Cada portal somos nosotros y sin embargo, ya no nos comemos en cada portal... ¿Cómo se come eso?
Ayer me senté en nuestro banco, seguía oliendo a palomitas dulces, a café vienés y a todos los besos que un día nos dimos.  Quizá llegué tarde, yo siempre llego tarde, me da igual donde sea, igual llego tarde a comer, que a cenar, que a comerte, pero para qué quieres las prisas cuando algo es eterno...
La eternidad es un vocablo complejo. Yo te espero aquí, queriéndote infinito el tiempo que me quede hasta agobiarme, mientras tanto recuerda que la cama mide 2 metros, la vida es mucho más larga que eso.


Y llueven lágrimas sobre el café.

3 comentarios:

  1. Como me gusta cuando la mayor parte de lo que escribes es como si lo estuviera escribiendo yo. Precioso. Esperemos que Noviembre nos envuelva con esa parte mágica del invierno. Al menos yo lo deseo, me hace mucha falta. Por cierto, me encanta la BSO de tu blog ;)

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  2. Que bonito, digno de una chica bonita como tu!! :)

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  3. Me encanta :3 Eres una artista escribiendo, en serio :)

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