viernes, 15 de marzo de 2013

Otra triste historia más.

LLevo dos años esperándote, he tardado dos minutos en quererte. No estoy buscando noches fáciles, lo que yo quiero es aprenderte. Y ahora no sé si presentar mis credenciales a tu boca, no conozco otro lugar para escaparme de las sombras. Ya te estoy imaginando haciéndome el amor en la cocina, haciendo jaque mate a la rutina, queriendo reventar el porvenir. Ya te estoy imaginando sacando el desamor de mi cuaderno, mandando un arsenal contra el invierno, trepando el mundo que yo construí. Ya te estoy imaginando. Tus manos para recoger los desengaños de mi vida, tus manos para confesar todas las cosas que no fueron escondidas. Y ahora debo dejar de ser experta en labios imposibles para que mi boca y tu piel se hagan un cuerpo indivisible.

1 comentario:

Pestañeos